La proporción actual de viejos en el ISSSTE, semejante a la que tendrá el país en 20 años

Ciudad de México, noviembre 07 (AMRA).- La estructura poblacional vigente del ISSSTE es un augurio de lo que será la población en general de nuestro país dentro de dos décadas en materia de adultos mayores, señaló la doctora Alba Moguel Ancheita, subdirectora de Prevención y Protección a la Salud de la Subdirección General Médica del ISSSTE.

Actualmente, dijo, a nivel nacional el número de personas con más de 60 años es del 7%, mientras que en el Instituto la cifra es del 17%.

Por su parte, el doctor Efraín Palacios Quintero, jefe de servicios de Programas de Prevención y Atención Médica de Enfermedades Crónico-Degenerativas, indicó que ante esta realidad el ISSSTE fortalece sus acciones preventivas de salud, a fin de disminuir los costos y cargas que implican tanto a nivel institucional como familiar las enfermedades crónicas, mejorando así la calidad de vida.

La intención es prevenir, evitar o retrasar la ocurrencia de enfermedades crónicas como diabetes, los diversos tipos de cáncer, tanto en general como los específicos del hombre y la mujer; la hipertensión arterial, osteoporosis y arritmias cardiacas derivadas de la hipertensión, entre otras.

Se trata de ayudar a la población para que la amplia expectativa de vida que en promedio prevalece en el país se pueda lograr por el mayor número de personas, pero que su existencia se cumpla con niveles mínimos de calidad, con la menor afectación de enfermedades, a fin de lograr una vejez con dignidad, señaló Alba Moguel.

En este sentido, indicó que el ISSSTE, durante la presente administración, desarrolló una serie de acciones encaminadas a brindar una mejor atención y protección a la salud de los usuarios, con medidas específicas preventivas como la vacunación contra influenza y neumococo, además de la detección temprana de enfermedades crónico-degenerativas y sus factores de riesgo.

El ISSSTE tiene una gran población adulta mayor que incrementa la demanda de servicios médicos en padecimientos crónicos.

De acuerdo a su estructura poblacional actual, somos el espejo de lo que será México dentro de 30 años, explicó Moguer Ancheita.

Por ello es importante estar preparados, especialmente reconociendo también los efectos de enfermedades como tabaquismo, obesidad, alcoholismo, farmacodependencia y depresión, que si bien no tienen el mismo impacto en el ánimo de la sociedad, sí afectan severamente el estilo y calidad de vida de la población, pues son males que llegan a comprometer la vida misma.

Mencionó como ejemplo que para incrementar su eficiencia en la atención de los pacientes adictos al tabaco, el Instituto ha instalado en diversas clínicas del país módulos para tratar este problema de salud.

Aunque se ha incrementado la demanda de este servicio, aún algunas personas no consideran que el tabaquismo sea una enfermedad y lo toman como un fenómeno social.

Sin embargo, dijo, es un problema que afecta nuestra salud de manera integral: daños al corazón, el cáncer de pulmón y diversos padecimientos han quedado plenamente demostrados que son consecuencia directa del tabaquismo. Adicionalmente –y esto es muy lamentable-- los fumadores afectan a su familia, ya que la convierten en fumadores pasivos.

En este sentido, Quintero Palacios indicó que los programas preventivos, como el de Envejecimiento Exitoso, están dirigidos no sólo a los mayores de 60 años, sino a los adultos jóvenes, a fin de identificar factores de riesgo de enfermedades y modificar así sus hábitos de vida. Cuando ya se presentó el padecimiento se aplican en forma oportuna tratamientos para disminuir sus efectos o evitar mayores complicaciones.

CEJ/JVR/AMRA