agosto 16, 2006

Se resquebraja el PRD

(Foto: Gustavo Camacho)

Ciudad de México, 16 agosto (AMRA).- En las filas del PRD comenzaron a circular versiones en el sentido de reagruparse en torno al jefe de gobierno capitalino electo, Marcelo Ebrard Casaubón, para abandonar al ex candidato de la coalición por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador.

Colaboradores cercanos del dirigente de la corriente izquierdista Unidad y Renovación (UNYR) Armando Quintero, uno de los principales organizadores del mega plantón, hicieron saber que les comienza a parecer obvio lo inútil y lo desgastante de mantener los campamentos de manera indefinida, como ha anunciado López Obrador.

Críticas a las decisiones del tabasqueño circularon en grupúsculos dentro de los campamentos, ante la que se advierte como inevitable “imposición del candidato de la derecha”, a cuya lucha si bien no han renunciado, prefieren enfrentar de otro modo.

En los campamentos de la coalición, la mayor parte del perredismo capitalino proviene de la corriente Unidad y Renovación, del mencionado Armando Quintero, quienes han iniciado una lenta, discreta y silenciosa retirada de las acciones de resistencia civil para incorporarse, cada vez de manera más activa, a las filas de Ebrard Casaubón.

Empero, no se trata de una deserción, dicen, porque el jefe de gobierno capitalino electo, “no es nadie”, sin el apoyo de López Obrador, de la misma manera que el Partido de la Revolución Democrática carecería de fuerza en la capital del país, si se distancia del de Tepetitán-Macuspana.

Para los integrantes de Unidad y Renovación, la retirada tendría el propósito, primero, de hacerle ver a Andrés Manuel que no tiene sentido caminar por el sendero de la confrontación y que, segundo, en todo caso convendría más políticamente fortalecer la resistencia, a partir del bastión que es el PRD en la capital del país.

Como quiera que sea, la unidad del PRD en los campamentos de resistencia civil pacífica, comienza a presentar signos de debilitamiento, tras la que se advierte como obcecación del tabasqueño por ganar la Presidencia de la República, a cualquier costo.

JB/JVR/AMRA