Ríspida pasarela de candidatos al TFE
Ciudad de México, octubre 24 (AMRA).- La pasarela de los 18 candidatos a magistrados del Tribunal Federal Electoral, no fue tersa para algunos de los primeros nueve suspirantes que comparecieron este martes ante las comisiones unidas de Justicia y Estudios Legislativos, Primera. El PRI y el PRD arremetieron contra la ex secretaria ejecutiva del IFE, María del Carmen Alanís Figueroa, a quien le cuestionaron su inexperiencia en materia jurisdiccional electoral y su relación de amistad con la próxima primera dama de México, Margarita Zavala, ante la comisión de un posible tráfico de influencias
El primero en comparecer fue el secretario de Acuerdos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, José Javier Aguilar Domínguez, quien no recibió crítica alguna de los senadores, a pesar de su estrecha relación con el titular del Poder Judicial de la Federación, Mariano Azuela Güitrón.
Tocó después el turno a la ex secretaria ejecutiva del Instituto Federal Electoral, María del Carmen Alanís Figueroa, quien de entrada recibió fuertes señalamientos del priísta Pedro Joaquín Coldwell, él que le cuestionó que si no vulneraría el prestigio e imparcialidad del TRIFE, su relación de amistad con Margarita Zavala.
“... Que pone en evidencia su relación personal con la distinguida esposa del presidente electo, quien a su vez es destacada militante de un partido político. Dicha relación es legítima e incuestionable desde el punto de vista personal. Pero, coloca bajo sospecha la imparcialidad que usted estaría obligada a demostrar en medio de decisiones electorales controvertidas. Y por otro lado, abre de ante mano antes del inicio del nuevo gobierno, innecesarias suspicacias políticas sobre un eventual y posible tráfico de influencias”.
Alanís Figueroa se defendió de esta mordaz embestida, al aseverar que ella no negaba a sus amistades, pero que su desempeño laboral jamás se ha guiado por sus relaciones personales.
“... Y uno de los principios en los que creo es en la amistad y no niego a mis amistades. Pero, yo le puedo afirmar a usted señor senador y a todos ustedes, que nunca, nunca han guiado mi ejercicio profesional, mis relaciones personales. Pero, eso es lo que yo les puedo asegurar, que nunca la amistad o un vínculo personal, ha guiado mi actuación profesional.
He desempeñado cargos en esta materia y en los cargos que he desempeñado, uno de los requisitos es ese: el no tener vínculos partidistas. Nunca he buscado un cargo de elección popular, un cargo directivo en un partido político, me he dedicado a la materia electoral”.
Pero, los embates contra María del Carmen Alanís, vinieron ahora del flanco del PRD. Leonel Godoy Rangel deslizó en el pleno de las comisiones, que la ex secretaria técnica del IFE había fungido como asesora del ex candidato del PAN, Felipe Calderón.
“... ¿Si es cierto que usted fue asesora de la campaña presidencial de Felipe Calderón?”.
Con el rostro desencajado por los ataques que le habían proferido, Alanís Figueroa negó cualquier vínculo con el Presidente electo.
“... La respuesta es no fui asesora del presidente electo, Felipe Calderón, yo tengo un despacho en materia electoral y otras materias y conjuntamente en mi despacho tomamos la decisión de no trabajar para ningún partido político en el litigio de los resultados electorales”.
Quien se pensó también sería cuestionado por su parentesco con el diputado federal del PAN, Diódoro Carrasco Altamirano, Constancio Carrasco Daza, pasó la prueba de la comparecencia. Si acaso se le cuestionó su poca experiencia en el ámbito del derecho electoral.
El resto de los candidatos que comparecieron, Elvia Rosa Díaz de León D’Hers, María Macarita Elizondo Gasperín, Flavio Galván Rivera, actual secretario ejecutivo del TRIFE, Héctor Arturo Mercado López y Carlos Axel Morales Paulín, no tuvieron contratiempos al enfrentar a los senadores de las comisiones unidas de Justicia y Estudios Legislativos, Primera.
Manlio Fabio Beltrones Rivera, presidente de la Mesa Directiva del Senado, adelantó que si alguna o algunas de las seis ternas no alcanzan las dos terceras partes de la votación en el pleno, será regresada a la Corte, para que reintegre una nueva.
“... Si de las seis ternas, alguna o algunas de ellas, no logran configurar las dos terceras partes del Senado para ser votadas, tendríamos que enviarlas de regreso a la Suprema Corte de Justicia para que se reintegren las ternas y tengan amplias posibilidades de ser votadas”.
VM/JVR/AMRA
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